A veces al acceder a aplicaciones nativas del sistema como por ejemplo TextEdit, vemos que al intentar abrir, guardar o modificar archivos nos salta una advertencia de la denegación de permiso para abrir el archivo en cuestión o simplemente que no se ha podido guardar ya que está en ese momento siendo editado. Incluso se pueden dar casos extraños donde se puedan acumular mas de un archivo igual en el disco duro identificado con el sufijo «sb» seguido de un identificador para la aplicación en cuestión, un ejemplo sería «Sb-67d1h723-HUYxOl».
El sandbox es un método para aumentar la seguridad todo lo posible al «apartar» la aplicación de los recursos principales del sistema operativo, solo los que el desarrollador añade específicamente, sin que esta pueda modificar ningún valor del sistema poniendo en riesgo la integridad del resto. Algo así como ejecutar cada aplicación en módulos distintos en vez de en un «patio» común.
Pero en ocasiones el servicio o daemon encargado del sandboxing no funciona todo lo bien que debería por lo que nos encontramos que cuando se producen errores en el mismo, alguna vez restringe permisos que no debería, por lo que tareas a priori tan sencillas como guardar un documento o editarlo se convierten en un problema.
Así que si te encuentras con en este caso en concreto, donde haya alguna aplicación problemática que no te deje guardar documentos, primero deberemos intentar algo más específico antes de lanzarnos a intentarlo arreglar mediante la utilidad de discos con la reparación de permisos global o mirar corrupciones en el sistema de archivos.
Por lo que deberemos abrir la consola en la ruta, Macintosh HD > Aplicaciones > Utilidades > Consola o directamente buscándola en spotlight. Una vez hecho esto, buscaremos el daemon «sandboxd» que es el proceso que controla el sandboxing general del sistema.
Con la consola abierta y localizado el proceso, lo mejor es volver a relanzar la aplicación problemática para comprobar si saltan más errores, si vemos que se siguen sucediendo errores, probaremos a forzar la salida de la aplicación para volver lanzarla de nuevo. Si con estas todavía no conseguimos nada, reiniciaremos el Mac ya que supuestamente así se debería solucionar el problema al reiniciar también el proceso en segundo plano que está fallando.
Para asegurarnos bien buscaremos el contenedor de la aplicación que se encuentra dejando pulsada la tecla ALT mientras nos dirigimos al menú Ir en la barra superior del finder, aparecerá entonces la opción biblioteca y en la carpeta containers ubicaremos el contenedor del sandbox problemático el cual borraremos ya que no es mas que un duplicado de la estructura que tenemos en el contenedor del programa ubicado en aplicaciones. De este modo obligamos al sistema a volver a crearlo una vez reiniciemos. Con esto deberíamos poder solucionar bastantes problemas de sandboxing que se presenten en algunos programas. Si esto no es efectivo, entonces ya sí que podemos continuar con pasos mas generales.
Mas información – Posible solución a dos pequeños problemas en Mountain Lion 10.8.3
Fuente – Cnet