Este lunes Apple actualizó su línea de MacBook Air en la que se integraron las nuevas CPU Intel Broadwell y un nuevo chip gráfico Intel HD 6000. Ambos modelos, tanto el de 11″ como el de 13″ recibieron las mismas actualizaciones de procesador, pero además el MacBook Air de 13 pulgadas recibió un añadido adicional, un nuevo tipo de almacenamiento flash basado en PCIe en el que Apple afirmaba que es hasta dos veces más rápido que el usado en la generación anterior. Sin embargo lamentablemente el modelo de 11 pulgadas no ha recibido la misma actualización en lo que a almacenamiento flash se refiere.
Debido a esto la famosa web de iFixit, la cual dedica tiempo a desmontar distintos dispositivos de Apple para crear guías de cara al usuario, decidió probar de primera mano esa afirmación tan categórica de » hasta dos veces más rápido » que Apple usó como reclamo a nuevos compradores. Esto lo llevó a cabo mediante la comparación de las velocidades en lectura/escritura del SSD entre uno de los nuevos MacBook Air de 11 pulgadas y el reciente modelo de MacBook Air de 13″ de 2015.
Efectivamente al terminar las pruebas estas demostraron que fue casi prácticamente el doble de rápido. En concreto las velocidades medias de escritura para el modelo de 11 pulgadas de MacBook Air con Black Magic Disk Speed Test fueron de 315MB / s en escritura mientras que las velocidades medias de lectura arrojaron 668MB / s, unas velocidades realmente rápidas pero sin embargo el nuevo modelo de 13 pulgadas las pulverizó. El modelo de mayores dimensiones alcanzó una velocidad de escritura media de 629.9MB / s con una velocidad de lectura media de 1285.4MB / s… impresionante.
El desmontaje de iFixit del MacBook Air de 13 pulgadas reveló que el equipo estaría usando una memoria flash de Samsung con controladora de la misma marca. Por otro lado el desmontaje del modelo de 11 pulgadas que no cuenta con esta actualización de velocidad, estaba equipado con una memoria flash SanDisk y una controladora Marvell.
En definitiva es increíble ver como avanza la optimización de la memoria flash para alcanzar velocidades de vértigo, lo único que queda por ver es que la degradación por escritura y borrados cíclicos de información esté al mismo nivel para terminar de equipararse con los discos tradicionales, además de por supuesto una bajada en el precio por gigabyte en el almacenamiento. Si estos dos puntos llegan a darse en algún momento (va por buen camino) podemos despedir a los HDD casi con toda seguridad.
