La cotización bursátil de Apple ha cambiado de tendencia en menos de 12 meses. Era el primer semestre de 2015, cuando las acciones de Apple se encontraban en máximos bursátiles, siendo la primera empresa del mundo por capitalización bursátil.
La empresa empezaba a tener productos en fase de madurez. Esto es, vende gran cantidad de iPads, Macs y por supuesto iPhones, entre los productos más destacados. Sólo es posible vender más, con alguna novedad lo suficientemente atractiva para que el cliente cambie su producto actual por uno nuevo. Pero en ese momento la inventiva de Apple no se encontraba en su máximo apogeo.
A partir de ese momento, las ventas empezaron a descender por falta de novedades en sus productos y la compañía no mejoró los resultados trimestrales obtenidos en el mismo periodo del año anterior, por lo tanto, Apple ya ganaba menos. Pero Apple actuó rápido: la enorme capacidad de recursos de la compañía le permite realizar grandes inversiones en I+D. Invertir para continuar creciendo, esta ha sido la filosofía de Apple de los últimos meses. Novedades en la evolución de los iPhones, el desarrollo de los MacBook, así como los recientes MacBook Pro, son un ejemplo de ello.
Apple está cotizando hoy a 134 €, todavía un euro por debajo de su máximo del 28 de Abril de 2015. Pero los analistas bursátiles indican que el valor de la acción se encuentra infravalorada. Las acciones no han dejado de crecer los últimos cuatro meses. En la última publicación de resultados del pasado enero, la cotización aumentó 7 $ en un solo día.
A día de hoy, Apple es una de las compañías más valiosas, con una capitalización bursátil cercana a setecientos mil millones. Steven Milunovich de UBS y otros analista de prestigio, predicen un crecimiento de la acción. Drexel Hamilton va más lejos y sitúa el valor objetivo de la acción en 185 €.
«Máximo histórico desde hace 2 años», no he podido seguir leyendo después de ver semejante incogruencia