El 13 de octubre se reveló que Apple había perdido una importante demanda de patentes, que se centraba en la tecnología dentro de los procesadores A7 y A8 con ‘Wisconsin Alumni Research Foundation’ (WARF), la cual protege a la Universidad de Wisconsin.
Ahora según un informe publicado por Reuters, dice que ha llevado a Apple a ordenar pagar $ 234 millones en daños a la Universidad de Wisconsin por infringir una de sus patentes vinculadas a sus procesadores. Como se informó originalmente en el anuncio inicial del caso, WARF había pedido originalmente por los daños causados unos $ 862 millones, pero esta luego ha sido reducida a $ 400 millones.
Esta decisión significa que Apple tendrá que pagar aproximadamente la mitad de lo que buscada la ‘Wisconsin Alumni Research Foundation’, por los daños cometidos. Esta demanda de patentes inicialmente con la Universidad de Wisconsin, alegó que Apple había infringido sus patentes vinculadas a la tecnología utilizada en los procesadores A7 y A8, que serían utilizados en productos como los iPhones y iPads lanzados en 2013 y 2014. Esta tecnología contenía un método para mejorar la eficiencia de los procesadores. El caso fue descartado en contra de Apple, ya que se determinó que Apple había infringido esa patente.
El siguiente paso es determinar si Apple había infringido deliberadamente dicha patente, lo que podría significar que Apple tenga que pagar mucho más dinero que lo que se supone que va a pasar en un principio. Además de todo esto, WARF también ha presentado otra demanda en contra Apple por la misma patente, pero esta vez va dirigida a los procesadores A9 y A9X, que están equipadas en los iPhone 6, 6 Plus, iPhone 6S, iPhone 6S Plus , y el iPad Pro.