El año pasado, la compañía con sede en Cupertino fue citada por las autoridades del condado de Maiden, en Carolina del Norte y recibió una multa por valor de 40.000 dólares por hacer un mala gestión de los materiales potencialmente peligrosos en el centro de datos que tienen en este condado, según el último informe que ha publicado la compañía.
Según diversos documentos de dominio público, el diario The News & Observer informa que el Departamento de Calidad Ambiental de Carolina del Norte citó a Apple a finales de año para que aclarara una serie de violaciones ambientales entre las que se incluía el transporte de celdas de combustible gastadas, considerado material peligro, sin estar debidamente identificado.
Apple tampoco pagó las cuotas correspondientes de las empresas que generan grandes cantidades de residuos peligrosos, según afirma esta publicación. El centro de datos de este condado, hace uso de baterías de plomo, para destruir los discos duros que ya no son válidos, pero esta combinación genera una alta concentración de benceno, un material altamente tóxico y que según los inspectores fue generado en grandes cantidades durante los años que van del 2014 al 2016.
Apple ha pagado la multa pero sin admitir las irregularidades, siendo uno de los pocos, pero importantes, pero que se le puede poner a la empresa en su compromiso con el medio ambiente.
Según los residentes de la zona, estas instalaciones generan una gran cantidad de ruido y los helicópteros están continuamente volando por las instalaciones. Además, algunos contratistas locales se han quejado de que Apple no haya realizado contrataciones de personal en las localidades cercanas.
A pesar del malestar de algunos residentes, según el máximo responsable del Condado de Maiden, quien afirma que Apple está dando trabajo a unas 500 personas además de generar 1,5 millones de dólares anuales en impuestos, unas instalaciones que según algunos funcionarios del estado, han tenido un coste de 5.000 millones de dólares.