Muchos de los presentes puede que no sepan que Apple en un tiempo pasado vendió impresoras además de ordenadores e iPods. La compañía de Cupertino dio un frenazo en seco antes del año 2.000 y dejó de lado la fabricación y venta de las mismas.
Ahora sale a la luz una patente que revive esa posibilidad que Apple lance en un futuro de nuevo sus propias impresoras. Pero no te equivoques, Apple no está pensando en impresoras normales que podemos tener la mayoría de nosotros al lado del Mac, está pensando en las impresoras 3D.
Por el momento una de estas impresoras en 3D es bastante cara y poco a poco se están llevando fuera de lo que podemos llamar el mercado profesional, este tipo de impresoras cada vez son más comunes entre los usuarios como nosotros y es posible que debido a ello el mercado se estabilice y bajen los precios cómo ya está empezando a pasar. Evidentemente Apple sólo tiene una patente más de las miles que tienen registradas y en ella se puede observar una impresora 3D.
Vale, ahora ya sabemos que Apple tiene una patente sobre una impresora 3D, pero ¿qué está patentando si este tipo de impresoras ya existen desde hace tiempo en el mercado? Pues básicamente la patente enseña una impresora con dos cabezales y permitiría añadir distintos colores en una figura 3D gracias a una especie de tinte o spray de pintura. Esta impresora 3D a color sería muy interesante para los profesionales alejándose un poco del uso doméstico. Por ejemplo compañías cómo la propia Apple que crean un montón de prototipos tendrían la posibilidad de diseñar productos en colores, tamaño y forma igual que el producto final.
Esperaremos a ver que sale de todo ello pero a estas alturas ya tenemos claro que no será una impresora 3D que vaya a salir al mercado de forma inmediata, ni mucho menos.