En los últimos meses, el ecosistema de la App Store ha estado en el ojo del huracán tras la entrada en vigor de la Ley de Mercados Digitales (DMA) en la Unión Europea. Los reguladores europeos han puesto la lupa sobre las prácticas de la compañía californiana, hasta el punto de imponer sanciones de gran calado e incluso amenazar con multas adicionales si no se efectúan los cambios exigidos en tiempo y forma.
Las autoridades comunitarias exigen a Apple que permita a los desarrolladores informar a los usuarios sobre ofertas fuera de la App Store, facilitando alternativas de compra y evitando así un monopolio de facto sobre pagos y distribución en su plataforma. Apple, por su parte, asegura que está trabajando contrarreloj para adaptarse a los requisitos de Bruselas y evitar así nuevas penalizaciones económicas que podrían alcanzar hasta el 5% de sus ingresos diarios por cada día de incumplimiento.
Presión regulatoria y respuesta de Apple ante la DMA
El desencuentro entre Apple y la Comisión Europea se ha intensificado desde que, a finales de abril, la empresa estadounidense fue sancionada con 500 millones de euros por supuestas prácticas anticompetitivas. El foco está en las barreras que la App Store pone a los desarrolladores para informar a los usuarios sobre alternativas más asequibles fuera del ecosistema de Apple.
Desde la propia compañía manifiestan su frustración por los continuos cambios en los criterios regulatorios, que dificultan tener certezas sobre el cumplimiento exacto de la normativa. Según Apple, se están destinando importantes recursos humanos y técnicos para adecuar sus sistemas a la nueva legislación europea.
La Comisión Europea, por su parte, no ha querido anticipar movimientos, pero mantiene el pulso firme y deja claro que dispone de amplias competencias para actuar si se detectan nuevas infracciones, especialmente ahora que el calendario apremia y la fecha límite para implementar los cambios es inminente.
Nuevas medidas en la App Store y control parental reforzado
En respuesta a este nuevo marco, Apple ha anunciado una batería de reformas en la App Store y sus sistemas operativos. Una de las novedades destacadas es la llegada de funciones como el Permiso Parental para la gestión de comunicaciones de menores y la posibilidad de compartir solo el rango de edad con las aplicaciones, evitando así el tratamiento de datos sensibles. Puedes consultar aquí cómo gestionar un iPad sin Apple ID.
Con la llegada de iOS 26, iPadOS 26, macOS Tahoe 26 y otras actualizaciones, los padres contarán con más control sobre la configuración de las cuentas infantiles, desde la creación hasta el acceso a controles adaptados a la edad. También se incorporan herramientas para aprobar, o rechazar, la comunicación de los menores con nuevos contactos, tanto en Mensajes como en aplicaciones de terceros mediante el PermissionKit, una opción que refuerza la supervisión familiar.
Otra de las apuestas de la empresa es la implementación de listas más precisas de clasificaciones por edades en la App Store. La plataforma ahora distinguirá mejor entre diferentes franjas (14+, 16+ y 18+), lo que facilita tanto a usuarios como a desarrolladores determinar la idoneidad de una aplicación para cada grupo.
Herramientas antiabuso y protección de la privacidad
El refuerzo de las medidas coincide con una mayor vigilancia sobre el uso y tratamiento de los datos personales de menores. La nueva función para compartir únicamente el rango de edad con las apps, gestionable por los padres, pretende reducir riesgos innecesarios y evitar el almacenamiento de información sensible, en línea con las exigencias europeas de privacidad.
También se han endurecido las condiciones para desarrolladores, a quienes se les exige transparencia sobre el contenido de sus aplicaciones: si incluyen mensajería, publicidad o la posibilidad de intercambio de datos entre usuarios, esta información será visible en las fichas de producto de la App Store. Así, se persigue una mayor claridad para las familias y se evita que los menores accedan a contenido inadecuado o a funciones potencialmente peligrosas.
En paralelo, la función Seguridad en las Comunicaciones se amplía para actuar no solo en mensajes, sino también en videollamadas y álbumes compartidos, permitiendo activar filtros automáticos cuando se detecte desnudez u otro contenido sensible.
Adaptación de las políticas para desarrolladores en el contexto europeo
La actualización de las normas para desarrolladores y la integración de nuevas API, como la de Rango de Edad Declarado, son otra de las respuestas de Apple a la regulación europea. Estas interfaces técnicas buscan asegurar que los controles de edad y las restricciones de contenido se apliquen correctamente y de manera automatizada, evitando que los desarrolladores encuentren resquicios legales para saltarse la normativa. Puedes aprender a gestionar la información compartida desde tu iPad.
Apple también ha puesto fin a prácticas como el Bitcode obligatorio y ha ajustado las reglas de monetización y pruebas en TestFlight, cerrando la puerta a la elusión de los procesos oficiales de la App Store. Igualmente, se han reforzado los criterios para las suscripciones y la gestión de pagos, siempre con la vista puesta en limitar la fragmentación y diversificar los métodos de compra fuera de los cauces aprobados.
Implicaciones para el usuario y próximas etapas
Para los usuarios, el resultado de esta oleada de cambios será una mayor transparencia y control sobre qué información se comparte, qué apps pueden instalar los menores y cómo se gestiona la privacidad. Los padres tendrán herramientas más afinadas para decidir con quién pueden comunicarse sus hijos, qué aplicaciones aparecen en función de la edad y a qué tipo de contenido pueden acceder.
El cumplimiento de la ley europea no solo afecta a la experiencia de usuario, sino que marca también un antes y un después para los desarrolladores, que deberán adaptarse a estándares más exigentes en cuanto a privacidad, transparencia y protección del menor.