Apple ha renovado su gama media de tablets con el iPad Air 13, un modelo dirigido a quienes buscan una pantalla grande y buen rendimiento sin pagar el precio del iPad Pro. Aunque de primeras apenas hay cambios estéticos o de funcionalidad respecto a la generación anterior, la principal novedad es el salto al procesador M3. Pero, ¿realmente se nota el cambio en el día a día? ¿Y qué dicen los tests de rendimiento?
En este artículo analizamos los resultados de benchmarks del iPad Air 13 con chip M3 y te contamos hasta qué punto supone una diferencia notable respecto a modelos previos, así como frente al resto de la gama iPad. Si estás pensando en adquirir una tablet potente y versátil para uso profesional o multimedia, aquí tienes lo que debes saber.
¿Qué hay de nuevo en el iPad Air 13 M3?
El salto más significativo del iPad Air 13 es la integración del chip M3, que introduce mejoras técnicas interesantes, especialmente para quienes exigen potencia extra en tareas más avanzadas o creativas. Este procesador M3, en esta variante de iPad Air, cuenta con 8 núcleos de CPU y, de manera inédita, 9 núcleos de GPU, una combinación que hasta ahora no habíamos visto en los Mac.
Más allá de este cambio en el corazón del dispositivo, el resto de características apenas varía: pantalla Liquid Retina de 13 pulgadas con tecnología True Tone y gama de color P3, sin ProMotion ni Face ID, y compatibilidad con los últimos accesorios como el Apple Pencil Pro y el nuevo Magic Keyboard. La batería, las cámaras y el diseño físico se mantienen sin cambios respecto a la generación anterior.
Benchmarks: ¿Cuánto rinde el M3 en el iPad Air 13?
Con la llegada del M3, las cifras de rendimiento sintético han subido en los benchmarks tradicionales. Según los resultados obtenidos con una unidad equipada con 1TB de almacenamiento, el nuevo chip consigue puntuaciones superiores en todas las pruebas, tanto en rendimiento de CPU como, sobre todo, en tareas gráficas.
La GPU de 9 núcleos marca la diferencia en juegos y aplicaciones que aprovechan aceleración por hardware, permitiendo funciones como el ray tracing o el mesh shading. Esto se traduce en una experiencia notablemente más fluida en títulos exigentes o apps creativas que sacan partido a estas tecnologías.
Las mejoras en velocidad en tareas cotidianas, como navegar, editar documentos o consumir contenido multimedia, son notablemente perceptibles, aunque no tan dramáticas como en pruebas sintéticas. En general, el Air 13 con M3 puede afrontar cualquier tarea sin dificultades, ofreciendo una experiencia fluida y eficiente.
Autonomía, pantalla y accesorios: sin sorpresas
En el apartado de autonomía, la duración de la batería ronda las 5 horas a brillo y volumen máximos en uso intensivo, cifras muy similares a modelos previos. El panel sigue siendo uno de los puntos fuertes, con buena reproducción de color y visibilidad en distintas condiciones, aunque limitado a 60Hz de refresco; sigue sin llegar al nivel de los Pro en fluidez visual.
El nuevo Magic Keyboard también ha recibido una actualización con fila de funciones y trackpad más grande, aunque sin retroiluminación ni mecanismo háptico. El teclado ofrece una sensación de escritura notable para quienes usan el iPad Air en modo portátil, pero su precio sigue siendo elevado, como es habitual en accesorios de Apple.
Motivos para elegir (o no) el iPad Air 13 M3
La elección de este modelo cobra sentido especialmente si quieres el tamaño grande de 13 pulgadas al menor precio posible, necesitas el plus de potencia del M3 para trabajo creativo, o planeas sacarle partido al Apple Pencil Pro en pantalla grande sin llegar al desembolso del Pro.
Quienes busquen simplemente un iPad funcional para tareas básicas encontrarán mejores opciones por menor precio (como el modelo básico o incluso el Mini). El iPad Pro sigue siendo la opción para quienes priorizan la máxima potencia y prestaciones premium, pero su coste lo sitúa en otro segmento.