Ha pasado un año desde que la Comisión Europea encontrara irregularidades en las impuestos pagados por Apple en Irlanda durante los años 2003 y 2014. Según se constató, la empresa de Cupertino obtuvo un trato de favor frente a otras empresas del sector y consiguió pagar mucho menos de los que le tocaba.
Fue entonces cuando la Comisión Europea decidió el 30 de agosto de 2016 que Apple debía pagar 13.000 millones de euros de ayudas estatales ilegales en un plazo de 4 meses tras la notificación oficial de la sentencia; es decir, su plazo terminaba —según la propia Comisión Europea— el pasado 3 de enero de 2017.
Asimismo, desde Bruselas saben que recuperar cierta cantidad de dinero no siempre es fácil, pero han declarado que ya ha pasado más de un año desde que se produjese la sentencia e Irlanda no ha recuperado el dinero. Es más, no ha recuperado ni una parte de las ayudas estatales. Es por esta razón, y porque Apple se continúa beneficiando de las ayudas ilegales, que han decidido llevar a Irlanda ante los tribunales.
Por su parte, Irlanda se mostró disconforme con la decisión tomada y recurrió la sentencia en la TUE con tal de evitar tener que recuperar la cifra estimada tras la sentencia. Sin embargo, este recurso no evita en ningún momento, según expresa la propia Comisión Europea en su comunicado y dirigiéndose al artículo 278 del TFUE (Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea). Ahora bien, lo que sí permite es recuperar el dinero e ingresarlo en una cuenta bloqueada a la espera del desarrollo de los procedimientos judiciales.
Por último, la CE también refleja en su nota de prensa que un Estado miembro de la Comunidad Europea debe aplicar la decisión de recuperación de inmediato, cosa que Irlanda no ha hecho. Y esto les permite volver a llevar al país ante los tribunales y pueden tener sanciones monetarias por este retraso.
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