Desde que llegó a nuestras vidas en antiguo OSX Lion, también llegó la posibilidad de los múltiples escritorios en el sistema, de modo que un usuario podía tener varios escritorios con aplicaciones diferentes en cada una de ellas.
A medida que ha ido evolucionando el sistema de la manzana mordida hasta llegar al actual OSX Mavericks, se han ido añadiendo nuevas funcionalidades que lo hacen cada vez más fácil y productivo de usar.
Hoy te traemos un pequeño truco, que te va a mostrar algo de lo que seguramente no te habías percatado, y es que si bien el sistema te deja crear distintos escritorios, cuando colocas un determinado archivo en el escritorio, éste se duplica en cada uno de los escritorios, de forma que la diferencia entre los escritorios existentes son las ventanas que tienes abiertas en cada uno de ellos.
Sin embargo, en esos escritorios puedes hacer una modificación que sí que no va a afectar al resto. Se trata de los fondos de escritorio que pongas. En cada uno de ellos vas a poder poner un fondo diferente que te ayude a identificar mejor el escritorio con un simple vistazo.
Para ello basta con ponerte en cada uno de los escritorios e ir modificando en Preferencias del Sistema en Escritorio y Salvapantallas los fondos que quieres para cada uno de ellos.
Recuerda que para crear los diferentes escritorios una de las formas de hacerlo es pulsar F3 en el teclado y luego situar el cursor del ratón en la esquina superior derecha hasta que te salga la opción de añadir. Para eliminar uno de ellos, igualmente te sitúan encima de la miniatura hasta que salga la “x” de eliminar en la esquina.
Más Información – Como añadir la ‘meteo’ y otros widgets en el escritorio del Mac
Sé el primero en comentar