Seguro que muchos os habéis fijado en que los productos de Apple casi siempre cuestan lo mismo en todas las tiendas. Ya podrás ir al vendedor autorizado más modesto, o a la cadena más multinacional, las variaciones en los precios son, la mayoría de las veces, inexistentes, y si las hay, no son ni mucho menos importantes. Sólo aquellos productos que pasan a ser descatalogados tienen rebajas considerables. Mientras grandes superficies ofrecen ofertas increíbles en ordenadores portátiles, sobremesa o tablets, los productos de Apple siguen con sus precios inalterables a lo largo del año. ¿Cómo lo consigue?
La estrategia que sigue es bastante fácil de entender: los márgenes de beneficio de los vendedores son mínimos. Apple ofrece sus productos a los vendedores a unos precio muy cercanos al precio de venta al público. De esta forma Apple consigue que los vendedores no puedan realizar grandes ofertas, a no ser que pierdan dinero con las ventas con el objetivo de conseguir clientela que luego compre accesorios para los productos de Apple, que sí que dejan mucho más margen de beneficios. Esto último no es que sea muy frecuente, pero sí es una estrategia que siguen puntualmente algunas grandes superficies.
¿Es esto beneficioso para Apple? Evidentemente, sí. Por un lado impide que las grandes superficies, con mucha más presencia en todo el mundo que Apple con sus Apple Stores, puedan poner precios que compitan con los precios oficiales de Apple. Obviamente, el beneficio que Apple obtiene con una venta mediante su red de tiendas oficiales o su tienda online es mayor que el que obtiene con una venta de una gran superficie, y sería absurdo que para que éstas obtengan más beneficio perjudique a sus propias Apple Stores. Por otro lado consigue mantener esa imagen de «productos premium», que cuestan prácticamente lo mismo vayas a la tienda que vayas.
¿Qué beneficios obtienen las tiendas que venden productos de Apple? Pues directamente con la venta de sus productos no obtienen grandes beneficios económicos, pero sí indirectamente. La venta de un producto de Apple se acompaña de múltiples accesorios cuyos márgenes son mucho mayores, y además ¿qué es una gran superficie que no venda Macbooks o iPads? Pues eso. ¿Qué beneficios tiene para los compradores? Pues obviamente, casi ninguno, porque no nos podemos beneficiar de ofertas que sí que ocurren en otras marcas. Y cuando digo «casi ninguno» es porque alguno sí que hay, y es que si quieres comprarte el nuevo Macbook Retina de 13 pulgadas, no tienes que dar muchas vueltas para buscar un buen precio, porque cuesta lo mismo en todos sitios.
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Fuente – MacWorld