La realidad es que perder los datos que tenemos en nuestro Mac puede reportarnos un gran problema: pérdida de trabajos, documentos, fotografías, etc. Es verdad que la probabilidad de fallo irreversible de un disco duro es baja, pero pueden pueden ocurrir accidentes de todo tipo: robo, inundación, incendio. Por lo tanto, vale la pena tener nuestros datos a salvo. Pero ¿cuando y donde hacer copias de seguridad?
El objetivo: cubrir todos lo imprevistos posibles.
Nuestro Mac nos ofrece una copia de seguridad a la cual accedemos desde el sistema. Se trata de Time Machine. En muchos artículos encontrarás como funciona si no estás familiarizado aún.
Archivos puntuales los guardaremos en la nube, estamos hablando de Documentos, fotos, música, etc. En el caso de documentos: el genuino Dropbox es un potente gestor, por su estandarización y eficacia de uso. En el mismo nivel tenemos iCloud drive de Apple, o Google Drive realizan la misma función. La ventaja de iCloud a partir de MacOS Sierra es la incorporación de copias de datos en la nube directamente de la carpeta documentos y escritorio.
En cuanto a Fotos, la aplicación de fotos cumple su cometido salvaguardando nuestro histórico de fotos. También podemos usar Google Fotos o servicios como Flickr.
Si hablamos de música, Apple Music es una opción muy recomendable, pero podemos utilizar también el servicio de streaming de Google para almacenar nuestra música.
A estas alturas, contamos con copia completa (Time Machine) y copia o copias parciales en la nube. ¿Es necesario hacer una más? Es recomendable hacer una copia en un disco duro y deslocalizarlo. Tu Copia en Time Machine puede tener algún accidente y el servicio en la nube puede dar error, olvidar la contraseña, etc. Por lo tanto, hacer una copia lo más amplia posible y dejar ese disco en otro lugar: trabajo, casa de algún familiar, etc, hace que tengamos una copia de nuestros datos siempre disponible ante cualquier incidente grave.
¿Que sistema de copias utilizas tu?
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