La agencia Bloomberg, una de las más controvertidas en relación a las noticias que publica, acaba de afirmar en base a unos rumores y distintas fuentes que Apple estaría esperando para comenzar la producción de su proyecto «secreto» de coche eléctrico para empezar a ponerlo en marcha sobre 2020.
Apple estaría presionando a los empleados que trabajan en el coche para tenerlo listo en cinco años aproximadamente, algo que a todas luces sería un movimiento para competir de tú a tú con los modelos que pueda lanzar General Motors o la propia Tesla en 2017.
Suponiendo que el desarrollo normal de un vehículo desde que comienzan los primeros bocetos del proyecto hasta que pasa a producción y finalmente a la venta, suele estar comprendido en un lapso de tiempo de entre cinco a siete años como mínimo, siempre suponiendo que no haya un modelo base anterior en el cual se base el nuevo modelo, sino comenzando de cero el propio proyecto.
Por ahora si Apple se fija como objetivo competir con estas compañías debería al menos conseguir una autonomía de 320 kilómetros y que su precio esté sobre los 35.000 euros sin sobrepasar en ningún caso este umbral. Hago especial hincapié en este punto ya que si quiere competir realmente con los «gigantes» del sector, debería ser la pauta a seguir aunque como todos sabemos, Apple no se suele regir por las pautas que dicta el mercado a no ser que no quede más remedio.
Por ahora durante los últimos meses, la compañía ha contratado empleados de empresas como Tesla, Ford, GM, A123 Systems, MIT Motorsports, Ogin, Autoliv, Concept Systems y General Dynamics. De todas formas aún está todo muy en el aire y no deja de ser un proyecto experimental según remarcan otras fuentes, por lo que si el desarrollo no está a la altura, Apple podría abandonarlo definitivamente.