Seguimos con los rumores relacionados con el Apple Watch Series 7, un terminal, que si no se enfrenta a problemas de fabricación, se presentará junto con el iPhone 13 en el mes de septiembre, evento en el que la compañía con sede en Cupertino también podría presentar un nuevo Mac con la segunda generación del procesador M1.
Esta nueva generación, contará con el nuevo procesador S7, un procesador que según afirma DigiTimes, sería de doble cara y más pequeño, por lo que Apple podría utilizar el espacio extra para incrementar el tamaño de la batería, uno de los puntos débiles desde siempre del Apple Watch.
Este nuevo chip estaría fabricado por Taiwán ASE Technology. Según se puede leer en su página web, la compañía ofrece una tecnología de fabricación de doble cara que permite la minituarización del procesador.
Según afirmó hace unos días Mark Gurman y Debby Wu desde Bloomberg, Apple ha estado probando reducir los biseles de la pantalla y una nueva técnica de laminación que acerca la pantalla a la cubierta frontal. Si finalmente Apple opta por este diseño, el nuevo Apple Watch podría presentar un diseño con bordes planos.
Además, según afirmó Prosser hace unos días, el Apple Watch podría estrenar un nuevo color, el verde (si tenemos en cuenta que hace tiempo que Prosser apenas acierta en sus predicciones, esta última información tenemos que cogerla con pinzas).
Además de un nuevo diseño, diferentes rumores apuntan a nuevas funciones de salud avanzadas como la detección de la temperatura corporal y el control de azúcar en sangre, aunque este último es probable que tarde todavía unos cuantos años en estar disponible en el Apple Watch.
Mientras se acerca la fecha de presentación del nuevo Apple Watch, a lo largo de los próximos meses, a buen seguro vamos a tener una buena ración de nuevos rumores, filtraciones y demás.