Estamos inmersos en plena campaña de rumores y posibles lanzamientos por parte de Apple a lo largo de este año pero, en este post, queremos darle la vuelta a todo ésto. Queremos mirar para atrás y ver cómo ha ido cambiando una de las partes fundamentales de todo iPhone. El botón Home.
El Home del iPhone
Está más que claro, que desde la salida al mundo, en 2007, del iPhone, ha sido una ley seguida por todos los fabricantes, el eliminar cualquier botón físico en los frontales de los terminales, llegando al ideal de tan solo dejar un único botón. En el caso de los iPhone (Sí, también de los iPad y iPod) a ese único botón lo llamaron botón Home, y ésta ha sido su evolución hasta la fecha.
En primer lugar nos encontramos con el primer iPhone, el de 2007, al que llamaron iPhone 2G y que no llegó como tal a España. En este caso, observamos un botón Home excesivamente grande con unos flex de datos muy largos y lo que llama más la atención, es que se encontraba unido al terminal de carga del dispositivo, por lo que si fallaba el botón, se debería sustituir todo el conjunto, haciendo más costosa y menos fiable la reparación del mismo.
A continuación, con la llegada del iPhone 3G (y posteriormente el iPhone 3Gs, ya que comparten mecanismo para el botón Home), el tamaño de todo el mecanismo interno del propio botón se ve reducido por completo, se separa del terminal de carga, y destacamos que se asienta sobre una parte firme del teléfono, su carcasa, eliminando cualquier posibilidad de desplazamiento o rotura que tendríamos si estuviera de forma flotante.
Con el iPhone 4, Apple, comete un grave error en el montaje del Boton Home, y como se demostró en su momento, les costó numerosas quejas de clientes a los que simplemente les había dejado de funcionar o “le funcionaba a ratos” (y obviamente no es una cosa con la que puedas vivir si tienes un iPhone). El error en sí, cosiste en el montaje del botón y de la membrana como un conjunto (la membrana es la parte metálica flexible, que es la que hace el contacto con el circuito), cambiando por completo la forma de hacer presión sobre dicha membrana haciendo, por una parte, que el adhesivo utilizado no hiciera totalmente su función y por otra, hacía mas propicios los desplazamientos del conjunto, que provocarían ese funcionamiento intermitente, ya que unas veces hace contacto, pero cuando se mueve de sitio deja de hacerlo.
Este problema se soluciona con el iPhone 4S, volviendo al diseño original de separar botón de membrana. Además se añade una junta de goma que evita la entrada de líquidos y suciedad. También siguen en las misma línea de reducir al máximo el tamaño que ocupan los componentes tales como cables flexibles y conectores con la placa base.
Llegamos al iPhone 5, en este caso todo sigue igual. Se mejora la membrana y la junta introducida anteriormente (se hace de un material mas duradero) y en este caso, se vuelve a montar de forma muy similar a como se hacia con los iPhone 3 y 3Gs
En el caso del iphone 5C, no merece la pena comentar mas, salvo que todo sigue igual que en el iphone 5, simplemente, desde Apple, dicen que lo mejoraron, pero nada significativo.
Por último, en el caso del iPhone 5S, se produce un mayor desarrollo, debido fundamentalmente a la inclusión en el propio botón del sensor de huellas dactilares, Touch ID. Esto implica la reducción del tamaño de la membrana, y su inclusión en el propio mecanismo del lector, que ahora forma un bloque con el botón Home. En lo referente a las conexiones, éstas se han visto aumentadas de forma necesaria, ya que ahora el conector, ha de transmitir datos (los recogidos por el sensor), directamente a la placa de la pantalla del teléfono, por lo que los conectores, ahora son más largos, y tienen más pines.
Con esto concluye el paseo por la historia más técnica del botón Home. Espero que ahora valoremos un poco más esta pequeña piececita, que en definitiva, no deja de ser un elemento icónico más de Apple.
Fuente: Faq-Mac