Un vídeo publicado por el creador ruso Wylsacom muestra un unboxing completo del iPad Pro M5, con encendido, navegación por iPadOS 26 y pruebas de rendimiento, antes de que Apple lo haga oficial. El metraje no son simples fotos borrosas: se ve el equipo en uso y se detallan datos internos del sistema.
La filtración resulta especialmente llamativa porque Apple no comercializa sus productos en Rusia. Aun así, el youtuber vuelve a adelantarse como ya hiciera con el MacBook Pro M4, reforzando la credibilidad de lo visto y apuntando a un lanzamiento cercano, probablemente en octubre.
Lo que enseña el vídeo: diseño y presentación del producto
La unidad filtrada corresponde a un iPad Pro de 13 pulgadas con chip M5, 256 GB de almacenamiento y acabado Space Black. A simple vista, el diseño es prácticamente idéntico al modelo con M4: perfil de 5,1 mm, cámara trasera única, cuatro altavoces y el Smart Connector en la misma ubicación de siempre.
En el embalaje se aprecia un enfoque conservador: la caja es algo más delgada y el fondo de pantalla promocional se mantiene. Hay, eso sí, un detalle que destaca: en la parte trasera del dispositivo ya no aparece la inscripción «iPad Pro», quedando únicamente el logotipo de la marca.
Unidad de producción y software: nada de prototipos
El dispositivo ejecuta iPadOS 26 desde el primer arranque, con las funciones y ajustes habituales del sistema. En la información de la batería se indica una fecha de fabricación en agosto de 2025, un dato que encaja con una unidad final de producción y no con un prototipo antiguo.
Tampoco se aprecian cambios en conectividad o en la disposición de puertos, por lo que es razonable esperar que accesorios actuales como teclados y fundas sigan funcionando sin problemas con esta generación.
Rendimiento del M5: CPU, GPU y caché
Las pruebas de Geekbench 6 apuntan a que el Apple M5 mantiene una CPU de 9 núcleos (tres de alto rendimiento y seis de eficiencia) y, aun así, logra un salto de potencia. En torno a un 10% en mononúcleo y entre un 12% y un 15% en multinúcleo, según los resultados mostrados.
La mejora va acompañada por por un aumento de la caché L2, que pasa de 4 MB a 6 MB, contribuyendo a esa subida sostenida en cargas de trabajo reales. En tareas del día a día puede notarse en aperturas más ágiles y menores tiempos de exportación en apps exigentes.
Donde el cambio es más llamativo es en la parte gráfica: la puntuación Metal sube alrededor de un 34-38% frente al M4. En AnTuTu, la ganancia en GPU es menor, cercana al 8%, pero consistente con un avance generacional que beneficiará a edición de vídeo, 3D y juegos.
Memoria y capacidades: más margen para multitarea
El modelo de 256 GB visto en el vídeo llega con 12 GB de RAM, un incremento relevante frente a los 8 GB que montaba la misma capacidad en la generación M4. Esto da más aire a la multitarea y a las apps profesionales, reduciendo cierres en segundo plano.
Para las configuraciones superiores es razonable esperar 1 TB y 2 TB, en línea con lo que Apple ha venido haciendo en otros productos recientes. En cualquier caso, el salto en la gama base ya posiciona al M5 como una opción más holgada para flujos de trabajo intensivos.
Calendario: cuándo podría anunciarse
Las presentaciones de iPad suelen concentrarse en octubre. Este año, además, la campaña de educación concluye el 21 de octubre, y Apple acostumbra a no lanzar novedades mientras mantiene promociones activas. Con ese contexto, gana fuerza un anuncio mediante nota de prensa a partir del 22 de octubre.
Al ser una actualización de corte interno (mismo diseño, nuevo chip), no sorprendería que Apple evitase un evento grande, salvo que decida agrupar otros productos, como Mac mini o MacBook Pro con M5, en un formato breve grabado.
La filtración y las incógnitas
Que el vídeo provenga de un país donde Apple no vende oficialmente sus dispositivos abre preguntas sobre cómo salió esta unidad. Wylsacom repite la jugada del año pasado con el M4, y esa trayectoria da más peso a lo mostrado, pero la cadena de suministro de la compañía vuelve a quedar en el foco.
Más allá de cómo llegó al mercado negro, lo enseñado encaja con una iteración continuista por fuera y un salto de rendimiento medible por dentro. Una pieza que, sin alardes estéticos, refuerza el perfil profesional del iPad Pro para quienes exprimen CPU, GPU y memoria en tareas diarias.
El retrato que queda es el de un iPad Pro que mantiene el chasis del M4, añade un M5 más capaz (sobre todo en gráficos), sube la RAM en la configuración base y apunta a un lanzamiento inminente tras la ventana promocional de octubre; una actualización centrada en potencia y continuidad.
