Después de casi cuatro años desde que ocurrió todo este revuelo meditatico relacionado con el precio de venta de los ebooks en la tienda iBooks Store, la Corte Suprema ha declarado finalmente culpable, de nuevo a Apple, por el pacto de precios que se gestó en aquel momento con los editores.
Sin embargo no estamos ante una nueva resolución ante la apelación que Apple ha interpuesto sino que como todo se mantiene, es simplemente una ratificación de la sentencia que ya en su momento la Corte Suprema impuso a los de Cupertino. Han creído oportuno que ni siquiera van a admitir a trámite la apelación que Apple ha interpuesto.
Allá por el 2012 es cuando comenzó todo este «culebrón», cuyos principales actores son Amazon y Apple. En aquel entonces era Amazon la que tenía el monopolio del mercado de los ebooks. Es por ello que tenía, por contrato, que los editores no podían fijar los precios de sus libros. Sin embargo, Apple quiso entrar en el mercado y tras ofrecer altas tasas de rentabilidad a esos editores parece ser que los mismos pactaron con los de Cupertino el fijar precios, lo cual se tradujo en una denuncia que ha llegado a estas consecuencias.
En su momento la Corte Suprema impuso a Apple una multa de 450 millones de dólares, de los cuales 400 millones iban destinados a devoluciones a los compradores de los ebooks relacionados con esta trama, 20 millones a los estados demandantes y 30 millones más en honorarios legales.
Como vemos, al final el tema de los ebooks deberá ser un episodio al que Apple lo único que puede hacer ya es enterrar y pagar lo que la Corte Suprema ha impuesto.