Preocupación. Esa es la palabra que mejor puede definir ahora mismo la situación que se está viviendo en el mundo de la tecnología. Sobre todo a pie de fábrica donde se está viendo que la escasez mundial de chips empieza a afectar a empresas tan potentes como Foxconn. La mayor aliada de Apple y la que más produce para la empresa de Tim Cook, ve como el suministro de chips desciende cada vez más y ya se empieza a avisar de unos recortes del 10%.
Siempre se ha dicho que lo mejor para trabajar en equipo es hacerlo en el sistema de la cadena. Sin embargo hay un problema y es que si un eslabón falla, el resto se ve afectado. Por eso siempre se suele contar con mas de una cadena y así poder suplir los inconvenientes. Sin embargo cuando el eslabón que falla, es el inicial, desde el que debe partir el resto, la solución es muy difícil. Es es lo que está pasando ahora mismo con los chips.
Hay una escasez mundial de chips que está afectando a todos los eslabones de la cadena. Hablábamos el otro día que Apple (y otras) podrían acabar aumentando los precios si se vieran forzados a ello por culpa de retrasos en los envíos de las empresas productoras. El problema y a no son los retrasos, son que no puedan enviarlos porque no hay materias primas y por tanto no es que haya problemas de fabricación, es que directamente no se pueda fabricar.
Queda poco para que se empiece a dar esa situación. Foxconn, el gigante asiático y mejor aliado de Apple ha anunciado que si las deficiencias siguen existiendo, es más que probable que tengan que reducir la producción de dispositivos en un 10%. Una cantidad muy alta teniendo en cuenta que es la primera previsión de recortes que se hace debido a la falta de existencias de chips a nivel mundial.
Según declaraciones del presidente Young LiuLa:
La oferta en los primeros dos meses de este trimestre todavía estaba bien, ya que nuestros clientes son todos muy grandes, pero empezamos a ver cambios que ocurrieron este mes. Foxconn es «actualmente» probable que envíe un 10% menos de productos de lo que había planeado, sin especificar el período de tiempo. Los suministros para los productos de la economía doméstica están particularmente limitados, agregó, ya que la pandemia ha impulsado una avalancha en esos pedidos. El impacto en las órdenes que se aseguraron hace mucho tiempo es bastante limitado. Es probable que la escasez se extienda al menos al segundo trimestre del próximo año.
Qualcomm tampoco se escapa de esta escasez. Peligran muchos dispositivos de Apple
La crisis de suministro que también golpea a Qualcomm afectará a una amplia gama de fabricantes de teléfonos inteligentes que dependen de la compañía para componentes clave. Apple, que adquiere paneles OLED de Samsung, también podría enfrentar interrupciones en la producción de iPhone. Samsung suministra actualmente pantallas OLED para el iPhone 11 y el iPhone 12. Vale que parece que Apple no tendrá problemas en iniciar la producción de los dispositivos con los nuevos chip A15 y M1 porque todas las grandes empresas tienen reservas para precisamente, evitar estos problemas.
No estamos hablando de que esta escasez se vaya a notar ya mismo. Estamos hablando de que es probable que a finales de año, cuando se anuncien los nuevos dispositivos para el 2022, tengamos que hacer frente a que no se pongan en el mercado el mismo número de dispositivos a los que estamos acostumbrados. Y si sólo fuera eso no pasaría nada. El problema es que los precios pueden subir y me temo que lo harán en una proporción no equivalente a la reducción de producción. Si ahora estamos hablando de una caída en producción de un 10% podríamos hablar de una subida de los precios entorno al 20% fácil.
Esperemos que la pandemia vaya acabando ya, porque desde luego no estamos sacando nada bueno de la misma. La pandemia es una de las mayores culpables de ese déficit de chip, debido a la cantidad de mercado que se ha movido con los dispositivos para el hogar. Lógico, con todas las horas que estamos pasando en nuestras casas.