La llegada de visionOS 26 supone una auténtica transformación para las Personas de Apple Vision Pro. El sistema de avatares digitales, que busca representar a los usuarios de forma fidedigna durante videollamadas o experiencias de realidad mixta, ha sido históricamente objeto de críticas por su falta de realismo y expresividad. Con esta última actualización, Apple apuesta por mejorar tanto en detalle visual como en naturalidad de movimientos, acercando sus avatares virtuales a lo que se espera ver en las conversaciones digitales del futuro.
Han pasado varios meses desde que los primeros usuarios pudieron probar las Personas originales, que presentaban un aspecto algo difuso, limitado en expresiones y con carencias claras a nivel de detalle en cabello, pestañas y geometría facial. Muchos llegaron a calificar dichas versiones como “extrañas” o incluso “inquietantes”, situándose de lleno en el fenómeno conocido como el valle inquietante, donde lo casi humano provoca incomodidad por su falta de veracidad.
visionOS 26: un paso adelante en naturalidad y tecnología

La nueva generación de Personas llega con una reconstrucción casi total de la tecnología subyacente. Según Apple, ahora se emplean sistemas de renderizado volumétrico y aprendizaje automático líderes en la industria para lograr una representación mucho más fiel del rostro del usuario. El resultado se aprecia en la definición de la piel o los pequeños detalles del vello facial y el cabello, y en la forma en la que las expresiones y gestos se reproducen con realismo y fluidez.
Entre las novedades más notables, destaca la capacidad de mostrar un perfil lateral completo y la mejora en la captura de características individuales como las orejas en 3D, pestañas o la textura del rostro. Los usuarios pueden también personalizar su presencia virtual, ya que existen más de 1000 combinaciones de gafas y opciones estéticas.
Apple mantiene una experiencia de configuración muy sencilla. Basta con apartar el visor, dejar que el sistema escanee el rostro durante unos segundos y ajustar parámetros como iluminación o accesorios. En pocos pasos, el usuario dispone de un avatar digital que, en movimiento, resulta mucho más convincente que en versiones anteriores.
Implicaciones y limitaciones de la nueva tecnología

El salto de calidad en las Personas es tan significativo que Apple ha decidido eliminar la etiqueta de “beta”. Ejecutivos de la compañía, como Greg Joswiak, han mostrado públicamente sus propios avatares grabados con visionOS 26, algo inédito hasta ahora y que indica la confianza en el nivel de madurez alcanzado por esta función.
Las limitaciones técnicas persisten. El sistema solo anima la parte frontal del rostro y la cabeza, dejando zonas laterales o traseras sin representación completa. Aunque la ilusión es convincente en videollamadas o entornos de realidad mixta, aún se nota en planos estáticos que se trata de una recreación digital, sobre todo si se observa con atención la textura o el mapeado de detalles delicados.
Asimismo, Apple enfrenta el reto de mantener este nivel de realismo en futuros dispositivos más compactos, como gafas o visores aún más pequeños. La precisión de las Personas depende de cámaras que captan movimiento de ojos, boca y mejillas. Reducir el tamaño del hardware planteará desafíos para capturar todos estos matices, aunque la compañía explora soluciones mediante inteligencia artificial y entrenamiento de algoritmos con diferentes perspectivas.
También se ha confirmado que la mejora en las Personas llegará a la pantalla EyeSight exterior del Vision Pro, logrando una imagen más natural y detallada para quienes observan desde fuera. Sin embargo, detalles como las manos todavía no alcanzan la misma calidad del rostro, aumentando el contraste entre las partes del avatar.
El papel social y la adopción futura de las Personas
Más allá de los avances técnicos, Apple visualiza a las Personas como una herramienta de gran potencial para la comunicación remota y la interacción en entornos virtuales. Poder realizar videollamadas o reuniones sin preocuparse por la apariencia, la iluminación o el punto de la cámara abre nuevas posibilidades tanto en la vida profesional como personal. En el futuro, la compañía podría extender las versiones de las Personas a otros dispositivos como iPhone, iPad o Mac, y facilitar la creación de múltiples avatares para diversos contextos sociales o laborales.
Aunque su aceptación social aún no es universal, su uso en conversaciones familiares o con amigos ocasiona comentarios o bromas. La normalización dependerá en gran medida de la popularización de los visores de realidad aumentada o mixta y de una reducción en sus precios.
La evolución de las Personas en Vision Pro representa un hito tecnológico imprescindible para lograr avatares cada vez más realistas y creíbles en experiencias de realidad extendida. Las próximas generaciones de hardware y software definirán si Apple logra establecer este estándar en todos los formatos y seguir siendo líder en la transición hacia una comunicación digital más humana y natural.