Una de las mayores pesadillas que puede vivir un usuario de cualquier equipo portátil es conectarlo a la corriente eléctrica y ver que el Mac no carga. Es posible también que sí cargue, pero lo haga de manera intermitente, o a una velocidad claramente reducida. Tranquilos, todos los motivos podrían estar relacionados.
En el artículo de hoy veremos todos los posibles motivos por los que tu Mac podría no cargar, o no estar recibiendo correctamente la entrada de energía. Los veremos de tal manera que podamos ir paso por paso descartando estos hasta dar con el problema de tu caso.
Antes de entrar en detalles, es importante que diferenciemos los dos posibles caminos por los que podríamos dar con el problema de carga de nuestro Mac.
Los motivos por los que un Mac podría no cargar la batería pueden ser de dos tipos: problemas de software o problemas de hardware. Veamos cada uno de ellos más en específico.
El Mac no carga por problemas de software
A veces, el Mac no carga su batería debido a algún ajuste o actualización del sistema operativo que afecta a la gestión de la energía. En equipos Windows se trataría del drivers, en el caso del Mac todo apunta a un único punto, las actualizaciones del sistema operativo. Veamos algunas de las cosas que puedes revisar para solucionarlo.
Comprobar actualizaciones de macOS
Buscar si hay actualizaciones disponibles para tu Mac y para el firmware del adaptador de corriente puede solucionar estos problemas de la manera más sencilla.
Puedes hacerlo desde Preferencias del Sistema > Actualización de Software. Las actualizaciones pueden mejorar la comunicación entre el Mac y el adaptador de corriente, y resolver posibles errores o incompatibilidades.
Reiniciar el SMC
Reiniciar el controlador de gestión del sistema (SMC), el cual es el encargado de regular la carga de la batería, entre otras funciones, puede también resolver el problema.
Para restablecer el SMC deberás en primer lugar apagar el Mac. A continuación, debemos mantener pulsadas las teclas Mayús + Control + Option. Todas ellas pertenecientes a la parte izquierda del teclado. Mientras las mantienes pulsadas, con el Mac apagado, pulsaremos el botón de encendido de nuestro equipo.
Tendrás que mantener toda esta combinación de teclas, incluido el botón de encendido durante al menos 10 segundos. Pasado este tiempo podrás dejar de pulsarlas y arrancar tu Mac con normalidad.
Desactivar las funciones de salud de la batería
Estas opciones están diseñadas para optimizar y prolongar la vida útil de la batería del Mac. Gracias a estas funciones tu Mac es capaz de pausar la carga antes de llegar al 100 %, o que reduzca el rendimiento del ordenador para ahorrar energía.
Puedes desactivarlas desde Preferencias del Sistema > Batería > Salud de la batería. Ten en cuenta que esto puede afectar a la duración y al estado de la batería a largo plazo.
La recomendación será en todo caso mantenerlas activadas, pero para descartar por último cualquier problema relacionado con el software podemos desactivarlo temporalmente.
El Mac no carga por problemas de hardware
Si tras revisar los anteriores puntos sigues presentando el mismo problema, todo podría apuntar a un problema con el hardware. No te preocupes, esto incluye el Mac, sí, pero podría venir también de otros componentes que son mucho más sencillos de reemplazar.
Revisar las conexiones
Uno de los primero puntos a revisar en torno al hardware será inspeccionar el cable, el adaptador y el puerto de carga. Asegúrate de que no haya ningún daño visible, como cortes, roturas, quemaduras o deformaciones. Si detectas algún problema, lo más apropiado será dejar de usarlo y reemplazarlo por uno nuevo o, en su defecto, uno compatible. También por supuesto, asegúrate de que todo esté bien conectado y encajado. A veces las cosas más sencillas son las que explican el problema más grave.
Probar otra fuente de alimentación
Es posible que el problema no sea ni del Mac ni del adaptador, sino del propio enchufe o del alargador donde lo estás conectando. Será importante cambiar de toma de corriente, usar otro cable o adaptador compatible. También podrías probar a conectar tu Mac a otro dispositivo con puerto USB-C, como un iPad o un iPhone, para ver si así consigue cargar.
Limpiar los conectores
En ocasiones puede haber polvo o suciedad que impida el correcto contacto entre el Mac y el adaptador. Puedes usar un paño suave y seco para limpiarlos con cuidado, o usa aire comprimido para soplar los residuos. En cualquier caso, evita a toda costa usar objetos metálicos o afilados que puedan dañar los conectores. Tampoco podremos usar ningún tipo de liquido para limpiarlo, salvo que contemos con un algún liquido limpiador de contactos de electrónica.
Aprovechamos para recomendarte uno de estos limpiadores, nunca se sabe cuando puede venirte bien para este tipo de casos.
Comprobar el estado de la batería
Este proceso lo puedes llevar a cabo desde el menú de estado, o bien desde Preferencias del Sistema > Batería. Si ves un mensaje que dice «Reemplazar pronto», «Reemplazar ahora» o «Servicio recomendado», significa que la batería ha perdido capacidad y necesita ser reemplazada.
Llegados a este punto no nos quedaría otra opción que contactar con el soporte técnico de Apple o llevar tu Mac a un proveedor de servicios autorizado para solicitar el cambio de batería.
Tras probar todo lo anterior mi Mac no carga
Si has llegado hasta este punto y sigues teniendo el mismo problema aun, todo podría apuntar a que el problema se está originando en el hardware de la placa base de tu Mac. En el mejor de los casos, puede que se trate de un componente secundario relacionado con la gestión de energía. De esta manera la reparación del Mac sería mucho más barata.
En cualquiera de los casos, volvemos a tener que dirigirnos a un servicio técnico especializado de Apple o alguna de sus tiendas físicas para una revisión por parte de un técnico. Por supuesto recuerda que si este problema te ocurre dentro de los dos primeros años de vida de tu dispositivo estará en garantía y Apple te lo reparará de manera totalmente gratuita, o si no es posible, lo reemplazará por otro dispositivo de mismo modelo.