A todos los que nos apasionan las carreras de coches o de motos, sabemos lo que es ir al rebufo. Es la ventaja que tiene ir segundo, ya que te permite no sufrir el rozamiento del aire, si vas justo detrás del primero, y no fuerzas tanto el motor de tu vehículo como el que va delante.
Pero para hacer eso, debes ser tan bueno como el primero, e ir «pegadito» a él. Si te separas mucho, ya pierdes esa ventaja del rebufo, y te costará mucho más adelantarlo. Eso le ha pasado a Intel. Pretende tener listo un procesador que supere a los M1 actuales…. ¡a finales del 2023!
AdoredTV ha conseguido un planning de actuación del fabricante de procesadores Intel, un tanto decepcionante para los fabricantes de ordenadores basados en los procesadores Intel. Dicha hoja de ruta muestra que Intel tiene previsto tener un nuevo procesador capaz de superar en prestaciones a los actuales M1 para finales del 2023. Demasiado tarde.
En el planning se ve claramente que Intel quiere competir con el MacBook Pro de 14 pulgadas de Apple con su serie de procesadores Arrow Lake. Según la hoja de ruta, los procesadores Arrow Lake de 15a generación de Intel podrían estar listos para enviarse a finales de 2023 o principios de 2024, ofreciendo un alto rendimiento con un bajo consumo.
También explica que Intel utilizará la arquitectura de 3 nm como TSMC. Apple utiliza actualmente el proceso de 5 nm para sus actuales chips y se espera que adopte la arquitectura de 3 nm en 2023 con los procesadores M3 de Apple y el A15 en el iPhone 15.
Está claro que de momento TSMC le está ganando la batalla a la todopoderosa Intel donde más le duele: los procesadores. Los actuales procesadores ARM de Apple de la serie A y M están muy por encima de los Intel, y parece ser que lo seguirán estando por mucho tiempo. Intel ha perdido el rebufo de TSMC.