Las aplicaciones de mensajería cifrada se han convertido en sinónimo de seguridad a la hora de entablar conversaciones a través de nuestros amigos y familiares. También se han convertido en un problema para las autoridades, autoridades que no pueden acceder al contenido de las mismas, ya que se cifran en el terminal de envío y se descifran en el terminal que las recibe.
Para los obsesos de la seguridad, tenemos a nuestra disposición Telegram, una aplicación que nos permite crear salas secretas de chats donde podemos configurar todos los mensajes enviados y recibidos para que se destruyan transcurrido un tiempo. Pero no es la única. Signal, aplicación recomendaba por Edward Snowden, se ha convertido en la aplicación favorita obsesionados con la seguridad.
Signal, nos ofrece un sistema de encriptado similar al que nos ofrece Telegram. También nos permite establecer salas de chat que podemos configurar para que automáticamente los mensajes enviados y recibidos se destruyan transcurrido un tiempo. Pero a diferencia de Telegram, Signal tiene un pequeño problema, un problema de seguridad ya que las notificaciones de los mensajes recibidos se almacenan en el Centro de Notificaciones, aunque el tiempo establecido para que se borre automáticamente haya finalizado. Al estar disponible todas las notificaciones recibidas, el objetivo de la privacidad que nos ofrece la aplicación deja de funcionar.
Según el investigador de seguridad Alec Muffeet, la única solución para evitar este problema, es desactivar las notificaciones de la aplicación por completo para que de esta forma, no se almacenen en nuestro centro de notificaciones los mensajes recibidos, mensajes que únicamente se eliminan si borramos las notificaciones manualmente. De momento esta es la única solución para evitar este problema, al menos hasta que Signal solucione este problema mediante una actualización de software. De momento, la aplicación para iOS no nos muestra el mismo problema que podemos encontrar en macOS.